THE SHOW MUST GO ON.

expr:id='"post-body-" + data:post.id'>

Y comienza el espectáculo, y la obra se desarrolla. Personajes, Hechos, Lazos, Sucesos. Y la obra continua, y cada vez es mas grande, mas extensa. Un enfado. Un beso. Diálogos. Sonrisas. Los papeles van tomando forma, actores secundarios, actores de fondo, y protagonistas. Estos últimos son menos,  son mucho mas importantes, sin ellos a la obra le falta algo... pero, ¿y si un papel termina? ¿Y si un actor tiene que salir de escena? ¿Y que pasa si es un actor principal, un protagonista? La obra quedaría vacía, todo se estropearía, habría que pararlo todo y nos quedaríamos esperando a que el personaje volviese a entrar, aun sabiendo que no lo hará. Y si esto sucediese al final todos los papeles quedarían estropeados, los actores hundidos y el espectáculo terminaría sin un final. Otra opción sería improvisar, intentar sacar la obra adelante, quizá al principio no quedase tan bien como debería, pero recordando el dialogo del personaje que falta, entre todos los demás actores podrían terminar la obra. Incluso quedaría bonita, muy bonita al final.
Y es que cuando un actor sale de escena, aunque sea un actor muy muy importante, hay que recordar que el espectáculo debe continuar, sin olvidar su personaje, pero actuando para desarrollar el tuyo, es tu papel.

Te hecho mucho de menos. Te quiero. Siempre.