expr:id='"post-body-" + data:post.id'>
He sido esa bofetada que necesitabas para despertar; ese empujoncito para saltar; ese encuentro, quizás demasiado brusco con la realidad. En cierto modo me alegro de que terminar así le haya hecho bien, al menos, a uno de los dos. Pero, un consejo, la próxima vez empieza andando, no volando... así el golpe que des no será tan fuerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario